lunes, 6 de marzo de 2017

LA SALVACIÓN DE LOS ESCOGIDOS DE DIOS


“Examinadlo todo; retened lo bueno” (1 Ts. 5: 21)
LA SALVACIÓN DE LOS ESCOGIDOS DE DIOS
Antes de entrar en esa materia, permítanme decirles que este servidor siempre ha buscado creer en la verdad escritural, sin prestar demasiada atención a posibles títulos y etiquetas de corte presuntamente humano. Arminianismo, Calvinismo, etc. poco han supuesto para mí en todos esos años de búsqueda de la verdad. Pero me di cuenta de cierto error que he llegado a cometer, y es el siguiente: detrás de presuntas etiquetas se pueden esconder grandes verdades, que por menospreciar dichas etiquetas, podemos no verlas y no aprovecharlas suficientemente.
A mí me enseñaron desde que conocí al Señor, y ya hace 30 años de eso, que la salvación se podía llegar a perder, y así lo creí por años y así lo enseñé, sin prestarle mayor atención al asunto en aras de una apologética de la santidad (lo cual, esto último, es bueno).
No obstante, desde hace ya algunos años, y conforme he ido entendiendo un poco más sobre la grandeza de nuestro Dios, en contraste con la pequeñez e insignificancia de nosotros, los hombres, algo en dentro de mí me iba mostrando que debía de ahondar más en muchas cuestiones teológicas.
Por mi cuenta empecé como nunca antes a profundizar el estudio acerca de la doctrina de la justificación en la Biblia, y leyendo los comentarios de probados hombres de Dios, y cada vez fui entendiendo más el puzle que tenía ante mis ojos.
Sin pretender defender etiqueta alguna per se, sí me veo en la responsabilidad de dar una explicación breve, pero lo más diáfana posible sobre este asunto; y esto es lo que voy a hacer a continuación.
1. ¿Tiene el hombre natural en sí mismo la capacidad de arrepentirse y convertirse a Cristo?
El Arminianismo enseña que el hombre natural, a pesar de quedar afectado por la caída de Adán, todavía tiene la capacidad espiritual de escoger el bien espiritual, y por tanto, tiene capacidad de ejercitar fe en Dios, para poder recibir el evangelio, y de este modo obtener la salvación; ¿Es eso verdad? No, no es verdad.
La realidad es que el hombre natural, no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente (1 Co. 2: 14).
La realidad es que el hombre natural está muerto en sus delitos y pecados (Ef. 2: 1), y un muerto espiritual no puede buscar a Dios, su hombre interior está muerto.
La razón de estar muerto nos la concede la Escritura: “como el pecado entró en el mundo por un hombre, y por el pecado la muerte así la muerte pasó a todos los hombres, por cuanto todos pecaron” (Romanos 5: 12)
El pecado causó la muerte espiritual, la corrupción total del ser humano y la consecuente condenación. La Biblia nos dice que el intento del corazón del hombre es malo, ya desde su juventud (Gn. 8: 21)
A grandes rasgos, esta es la condición del hombre natural: está muerto, y los muertos no pueden hacer nada. La depravación humana es total, y por tanto, el hombre es incapaz de buscar el bien (el de Dios) por sí mismo; su hombre interior está paralizado por el pecado. Eso significa estar condenado en esta vida.
“Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas” (Jn. 3: 19). La condición natural del hombre es la de amar las tinieblas en vez de la luz, o dicho de otro modo, el hombre natural no buscará la luz, sino que buscará todo lo concerniente a su ego, en el espíritu del propio Satanás, al que sirve sin ser consciente de ello.
Concluyo en este punto: La condición del hombre natural es de total depravación y consecuente muerte espiritual, refutando así la posición arminiana de sólo estar parcialmente afectado por esa caída adámica.
Existe una gran diferencia entre un muerto y un enfermo. El posicionamiento arminiano, es que el hombre está “enfermo”, mientras que el bíblico es que está muerto.
“Al hombre natural, las cosas que son del Espíritu de Dios no le interesan, porque se han de discernir espiritualmente (1 Co. 2: 14), y esa capacidad la tiene muerta por causa de la separación exhaustiva de Dios, por causa del pecado original”
“Al hombre natural, las cosas que son del Espíritu de Dios no le interesan, porque se han de discernir espiritualmente (1 Co. 2: 14), y esa capacidad la tiene muerta por causa de la separación exhaustiva de Dios, por causa del pecado original”
2. ¿Escoge Dios para salvación a aquellos que le responderían?
El Arminianismo enseña que existe una elección condicionada a la aceptación del hombre. Así, la condición la pone el hombre, no Dios. Según el Arminianismo, Dios buscó salvar a aquellos que Él sabía le iban a aceptar.  Así que la prerrogativa la tiene el hombre, no Dios. Es el hombre el que de alguna manera le dice a Dios: “¡Estoy dispuesto a que me salves!, ¡Sálvame!”. Esto es absolutamente inverosímil.
Otra vez decimos, un muerto no puede hablar… Pero si recordamos lo expuesto arriba, según Arminio, el hombre no cayó del todo y puede todavía pedir ayuda. Pero no, insistimos. El hombre cayó del todo y su depravación es total.
El salvar a aquellos que aceptarían la salvación, en términos teológicos se llama la “doctrina de la elección condicional”, y es la arminiana; no obstante lo contrario es la verdad: la elección es incondicional.
La elección es incondicional, ya que es Dios quien elige, no es el hombre en modo alguno. La doctrina de la elección, esta vez, incondicional, se manifiesta en toda su lógica bíblica por el hecho de que el hombre es un ser totalmente depravado e inclinado naturalmente al pecado. Siendo así, la solución (o la elección) no puede estar en el hombre, ni basarse en el hombre en modo alguno, sino en Dios, que tiene misericordia:
“Así que no depende del que quiere, ni del que corre, sino de Dios que tiene misericordia” (Romanos 9: 16)
Ahora bien, si el hombre no puede - ya no salvarse - sino pedir que le salven, incluso, si por su tendencia natural al pecado, busca en ese pecado su felicidad (Jn. 3: 20), obviamente la salvación no puede venir en modo alguno por parte de él. Ni es salvo, ni quiere salvarse, ni pide que le salven (porque la salvación significa estar con Dios, y eso la carne lo detesta), y no obstante hay hombres que se salvan… Entonces, ¿En base a qué se salvan? Evidentemente el protagonista es Dios.
Algunos se salvan, otros no, ¿Quién marca aquí la diferencia? Obviamente Dios, concluimos pues, la salvación la determina Dios, jamás el hombre. En otras palabras la elección es incondicional; es que Dios no ha elegido salvar a todos:
“y para que seamos librados de hombres perversos y malos; porque no es de todos la fe (2 Ts. 3: 2)
La Biblia nos da más que suficientes casos de esa elección incondicional de parte de Dios:
La elección de Abraham, el cual era un pagano entre paganos. La elección de Israel, un pueblo que ni siquiera existía y que seguidamente fue insignificante (Deut. 7: 7, 8). La elección de Jacob en vez de Esaú, cuando ni siquiera habían nacido, ni hecho bueno o malo (Ro. 9: 11-13). La elección de Gedeón, un hombre lleno de temores. La elección de David, un jovencito insignificante a ojos de los hombres. La elección de Pablo, un perseguidor de la iglesia… etc. etc. Pero como está escrito:
“…lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de que nadie se jacte en su presencia” (1 Corintios 1: 27-29)
El siguiente texto, muestra que la elección de Dios se corresponde según el puro afecto de Su voluntad, y que, por tanto, nada podemos añadir a esto:
“en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad (Ef. 1: 5)
La doctrina de la elección incondicional, fue la que enseñó Jesús: “Y en verdad os digo que muchas viudas había en Israel en los días de Elías, cuando el cielo fue cerrado por tres años y seis meses, y hubo una gran hambre en toda la tierra; pero a ninguna de ellas fue enviado Elías, sino a una mujer viuda en Sarepta de Sidón. Y muchos leprosos había en Israel en tiempo del profeta Eliseo; pero ninguno de ellos fue limpiado, sino Naamán el sirio” (Lucas 4: 25- 27)
Eso enfureció a aquellos judíos en la sinagoga, y eso mismo enfurece a muchos hoy en día también.
Entendámoslo bien: ES DIOS QUIEN ELIGE AL HOMBRE,  NO EL HOMBRE A DIOS.
(Juan 15: 16) “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca…”
(Romanos 9: 21) “¿O no tiene potestad el alfarero sobre el barro, para hacer de la misma masa un vaso para honra y otro para deshonra?”
(Proverbios 16: 4) “Todas las cosas ha hecho Jehová para sí mismo, y aun al impío para el día malo"
Nada podemos, o hemos podido hacer o haremos, que motive o haya motivado a Dios a escogernos. La elección de Dios para salvarnos se debe a que nos amó, independientemente de nuestros actos u obras. No nos eligió, por tanto, porque viera algo en nosotros que le hiciera tomar esa decisión.
Tampoco nos eligió porque viera que íbamos a saber o íbamos a poder aceptar a Cristo. No hemos sido escogidos debido a que íbamos a realizar la “buena obra” de “aceptar” a Cristo, todo lo contrario. Fuimos escogidos para hacernos capaces de “aceptar” a Cristo (Ef. 2: 10).
(Hchs. 13: 48) “Los gentiles, oyendo esto, se regocijaban y glorificaban la palabra del Señor, y creyeron todos los que estaban ordenados para vida eterna
Como vemos en esa escritura con excelsa claridad, los que creyeron, es que estaban ordenados para hacerlo, para vida eterna.
Antes, jamás tuvimos fe para poder ejercitarla para venir a Cristo, hasta el momento en que por Su gracia fuimos investidos del poder de Dios para recibir esa fe, y actuar en consecuencia:
(Efesios 2: 8, 9) “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe”.
Por la gracia de Dios obtuvimos la fe, lo cual es don de Dios. Por lo tanto nuestra presunta obra de “aceptarle” no cuenta. Le aceptamos por esa gracia irresistible nos convenció, y pusimos en marcha esa fe que nos fue dada también.
“El hombre natural no puede venir a Cristo en sus solas posibilidades. No tiene sentido pedirle que tenga fe, cuando está muerto en sus delitos y pecados (Ef. 2: 1)”
“El hombre natural no puede venir a Cristo en sus solas posibilidades. No tiene sentido pedirle que tenga fe, cuando está muerto en sus delitos y pecados (Ef. 2: 1)”
3. ¿Murió efectivamente Cristo por aquellos que pudieran decidir aceptarle o lo hizo por los elegidos del Padre?
Nótese que la pregunta es clara: ¿La muerte de Cristo tiene efecto potencial en todos en general, o realmente sólo en los elegidos? El Arminianismo enseña que Cristo murió para no salvar a nadie en particular, lo cual contradice la misma doctrina de la elección incondicional.
Es sencillo, si la salvación depende de la decisión del hombre, en esa medida, Dios está condicionado, y sólo salvará, no a los que Él decide salvar, sino a los hipotéticamente hablando, claman por salvación. Pero volvemos a lo mismo:
  • El hombre natural no puede libremente tomar una decisión para Dios, porque está muerto espiritualmente, y un muerto no puede decidir.
  • Dios no está condicionado por nadie ni por nada.
  • Dios es quien decide salvar a quien quiere (por eso es Dios)
  • Dios no tenía por qué haber salvado a nadie.
Consecuentemente, Dios no va a pedir un imposible al hombre natural, cual es, que éste decida creer en Cristo estando en la condición de muerte espiritual. Más bien es al contrario, como lo vemos en las Escrituras:
“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados” (Ef. 2: 1)
Estando muertos en vida, Él nos dio vida.
Por lo tanto, aunque Cristo dio su vida por los hombres, sólo aquellos hombres elegidos por Dios son salvos. Esto se llama expiación limitada, y es la enseñanza de la Escritura.
“…nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él” (Ef. 1: 4)
“Yo ruego por ellos; no ruego por el mundo, sino por los que me diste; porque tuyos son” (Juan 17: 9)
“porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados” (Mateo 26: 28) Nótese: por muchos, no por todos.
La razón de ser de la iglesia, es justamente la de ser la que es, la asamblea de los elegidos; la asamblea de los salvados por gracia.
No todos pertenecen a la iglesia, porque no todos son salvos, y los que son salvos, no es porque tuvieran alguna virtud en sí mismos que Dios viera de antemano y los decidiera salvar, sino porque Él decidió amarlos: “A Jacob amé, a Esaú aborrecí” (Ro. 9: 13)
Es Su elección; es Su prerrogativa.
La expiación es de hecho limitada; limitada por Aquél que escoge a quien salvar, porque puede hacerlo y quiere.
“Es la elección de Dios el salvar a quien dispuso salvar. No es la elección del hombre”
“Es la elección de Dios el salvar a quien dispuso salvar. No es la elección del hombre”
4.¿Puede el hombre natural frustrar la obra de salvación del Espíritu Santo?
¿Podrá el hombre resistir la voluntad explícita de Dios hasta el punto de doblegar a Dios? Sabemos que no, sin embargo, el Arminianismo enseña que el bendito Espíritu de Dios, cuando comienza Su obra de traer a una persona a Cristo, puede ser resistido y puede frustrar Sus propósitos. Enseña que el Espíritu Santo puede sólo puede cumplir Su cometido en tanto en cuanto el pecador no se resista y voluntariamente se sujete a Él.
O sea que, la voluntad de Dios depende de la voluntad del hombre. Si lo vemos despacio, esto es blasfemo.
Como cristianos, no podemos creer esto en modo alguno. La voluntad del hombre no puede ponerse por encima de la voluntad explícita de Dios, y aun así, el hombre siempre será convencido por Dios, cuando Dios quiera convencerle.
El Espíritu Santo es el encargado de convencer (Juan 16: 8). Cuando el Espíritu Santo actúa convenciendo al pecador, según la presciencia y el previo llamamiento del Padre, lo hace fehacientemente. Su poder es irresistible. Su llamamiento no puede ser frustrado por nada ni por nadie, y así como cuando uno mete la mano en el fuego y se quema sin remedio, así mismo actúa el Espíritu de Dios convenciendo al pecador y llevándolo al Salvador.
Cuando el Padre lo quiere, el Espíritu Santo actúa con gracia irresistible.
De ese modo aquella persona que Dios quiere salvar, la salvará:
(Juan 6: 37) “Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera”
(Juan 6: 44) “Ninguno puede venir a mí, si el Padre que me envió no le trajere; y yo le resucitaré en el día postrero”
(Juan 6: 45) “Escrito está en los profetas: Y serán todos enseñados por Dios. Así que, todo aquel que oyó al Padre, y aprendió de él, viene a mí”
(Gálatas 1: 15) “Pero cuando agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi madre, y me llamó por su gracia”.
Pablo resistió al testimonio de los creyentes, hasta el punto de enviarles a la muerte, hasta que… hasta que Cristo le tocó de tal manera que su respuesta inmediata fue: “¿Qué quieres que yo haga?” (Hchs. 9: 6).  Si Pablo, contumaz, fue tumbado de tal manera, ¿qué no podrá hacer Dios con aquél que quiera salvar? Eso se llama gracia irresistible, porque nadie la puede resistir.
Dios no deja a la libertad del hombre Su salvación.
“El hombre no puede oponerse a la voluntad de Dios cuando esa voluntad de Dios es explícita”
“El hombre no puede oponerse a la voluntad de Dios cuando esa voluntad de Dios es explícita”
5.¿Se puede perder la salvación?
El Arminianismo enseña que un hombre salvado por Dios (no uno que se dice salvo) podría final y definitivamente perder la salvación. Lógicamente, dentro del pensamiento arminiano, si un hombre puede decidir ser salvo, por tomar la iniciativa de serlo, pues deberá ser responsable de seguir siéndolo, o no. Si tomó la decisión de serlo, entonces podría tomar la decisión de no serlo. Esto dentro de ese tipo de pensamiento, claro.
Gracias a Dios que esto no es así, por todo lo que ya venimos argumentando. Piensen bien: Si la salvación se pudiera perder, ¡ni a usted ni a mí nos duraría la salvación un día! ¿Qué fuerza existe en nosotros mismos para hacer la voluntad de Dios? Ninguna.
Somos salvos porque nacimos de nuevo, y nacimos de nuevo para ser salvos. Porque Dios nos hizo nacer de lo Alto (Jn. 3: 3), hemos pasado de muerte a vida; vivimos en una nueva vida, muertos definitivamente al pecado y a su poder.
(Efesios 2: 1-6)
“Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás. Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos), y juntamente con él nos resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los lugares celestiales con Cristo Jesús
¿Qué la salvación se puede perder? No hombre, no; fíjense que Pablo inspirado por el Espíritu Santo enseña que Dios nos escogió, nos predestinó, nos llamó, nos justificó, y nos glorificó (Ro. 8: 29-30) ¡Ya estamos glorificados para Dios que nos tiene en la gloria! Si ya nos tiene en la gloria, o si ya estamos en la gloria en cuanto a El que es el Eterno (y eso es lo que realmente cuenta), de repente, ¿podemos salir de esa gloria e ir a condenación?... ¿ven como no puede ser?
Si juntamente con Cristo nos resucitó, y nos ha hecho sentar en los lugares celestiales con Él, ¿Cómo de repente podemos perder eso? ¿Se imaginan ustedes un día diciendo Dios algo así como: “Oh, vaya, Miguel estaba aquí conmigo en la gloria, y ahora no le veo… ¡Oh, ha decidido apartarse de mí, y ahora está en el infierno! Y yo sin saberlo”
¡No hermanos, la salvación verdadera es la que Dios contempla y ha contemplado desde la eternidad a la eternidad. El lo ve todo. El lo puede todo. El ve a todos los salvos, salvos para siempre.
¡Dios no salva a nadie, para que luego se pierda
La salvación que Dios provee no es algo así como, “Bueno, vamos a empezar a salvarte, a ver si consigues llegar al cielo”.
La Biblia enseña otra cosa:
(Romanos 9: 29-31) “Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó. ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?”
¿Quién contra nosotros?, ¡Nadie! incluidos nosotros mismos.
(Romanos 8: 14) “El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de DiosLos que somos hijos de Dios, LO SOMOS SIEMPRE, es decir, es conforme a Dios, no conforme a nuestra debilidad humana. Las Buenas Nuevas, son: salvación en Cristo Jesús, nada menos que eso.
(Romanos 8: 1) “Ahora, pues, ninguna condenación hay para los que están en Cristo Jesús”.  Hermanos, ¿Qué dice esta escritura?: NINGUNA CONDENACIÓN, ¡Amén!
Existe, o la condenación, o la salvación. Si para el verdadero creyente ya no hay condenación, es porque es realmente salvo, siempre salvo (el que lo es, no el que dice serlo, sin serlo)
(Romanos 5: 10) “Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida”
Hermanos, lo que Dios promete, lo cumple. Lo que Dios hace no hay criatura que lo pueda deshacer:
(Romanos 8: 37-39) “Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Por lo cual estoy seguro de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni potestades, ni lo presente, ni lo por venir, ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios, que es en Cristo Jesús Señor nuestro”.
Nada ni nadie nos podrá apartar del amor de Dios que es en Cristo Jesús, lo cual  significa que el resultado de la salvación, cual es la vida eterna, nadie nos lo puede arrebatar, ni siquiera nosotros mismos (1 Juan 3: 9).
“La salvación es un don de Dios, y a la vez, un acto de Su suprema voluntad, por tanto, nadie nos apartará del amor de Dios, que es en Cristo”
“La salvación es un don de Dios, y a la vez, un acto de Su suprema voluntad, por tanto, nadie nos apartará del amor de Dios, que es en Cristo”
Conclusión
1. El hombre natural (sin Cristo) está muerto en sus delitos y pecados, y no puede siquiera alzar un mínimo susurro al Cielo para pedir salvación. Un muerto no habla, ni se mueve. Un muerto está muerto. Por tanto el libre albedrío del hombre no puede aplicarse aquí.
2. Por consecuencia, Dios no salva al hombre porque este estuviera dispuesto a ser salvado. El hombre necesita ser resucitado, y el único que puede hacer eso, es Dios. La elección de Dios es incondicional, por tanto, en nada depende del hombre.
3. La redención efectiva sólo se aplica a los elegidos de Dios. Dios supo y quiso a quienes salvar, y los salvó desde antes de la fundación del mundo.
4. El hombre en modo alguno puede oponerse con éxito a la explícita voluntad de Dios. Él a quien quiere salvar, salva. Otra vez, el libre albedrío del hombre no puede aplicarse aquí. El hombre que va a ser salvado, lo es por la gracia irresistible de Dios.
5. La salvación por tanto, no puede perderse porque no depende del hombre el obtenerla, así tampoco el perderla. Es prerrogativa de Dios.
Algo menos que todo esto, es hacer un dios más pequeño y un hombre más grande, lo cual es blasfemo.
El hombre no merece nada. Está perdido y es hijo del infierno en su naturaleza. Sólo Dios, porque nos amó, decidió salvar a los que Él consideró que iba a salvar, sin más. El resto es cosa suya. El es Dios, nosotros… solamente polvo y ceniza.
¡A DIOS SEA TODA LA GLORIA!
© Miguel Rosell Carrillo, pastor de Centro Rey, Madrid, España.


miércoles, 18 de enero de 2017

CONTINUACIÓN...CAP

CONTINUACIÓN…..
Mattew Henry, Commentary on the whole Bible dice:
“La Iglesia es comparada con un edificio. Los apóstoles y profetas son la fundación de ese edificio. Aunque podemos llamarle fundamento secundario, porque Cristo mismo es el principal fundamento,  pero debemos entenderlo en referencia a la doctrina entregada por los profetas del Antiguo Testamento y los apóstoles del Nuevo”. 
John Wesley, Notas Explicativas de Toda La Biblia dice: 
“Como la fundación sostiene el edificio, así la Palabra de Dios, declarada por los apóstoles y profetas, sostiene la fe de todos los creyentes. Dios hecho el fundamento por medio de ellos, pero Cristo es la piedra principal de la fundación”. 
The New John Gil Expository of the Entire Bible dice:
“Los profetas del Antiguo Testamento y los apóstoles del Nuevo quienes echaron ministerialmente el único y solamente único fundamento, Jesucristo, porque no son las personas de los apóstoles y profetas y no meramente sus doctrinas lo que esta implicado aquí, sino Cristo quien es contenido en ellos y quien es el fundamento de la iglesia y todos los verdaderos creyentes son edificados en ese fundamento del pacto de la gracia, de la bendición de la promesa del ofrecimiento de la fe, la esperanza , la paz, el gozo y el confort de la salvación y felicidad eterna. En este fundamento los santos son edificados por el Padre, El Hijo Y el Espíritu Santo”. 
Barnes en sus Notas Sobre el Nuevo Testamento dice: 
“Fundamento de los apóstoles: doctrina que ellos enseñaron sobre la cual descansa la iglesia. 
Fundamento De los profetas: Los Profetas del Antiguo testamento, probablemente se utilice la palabra para referirse  al Antiguo Testamento en general”. 
Por todo lo expresado anteriormente, queda demostrado que la expresión fundamento de apóstoles y profeta no se refiere al orden jerárquico ministerial que pueda existir dentro de la iglesia sino al fundamento doctrinal que fue traído por revelación directa a los profetas de oficio del Antiguo Testamento y a los apóstoles que recibieron el soplo divino de la inspiración para traernos la Biblia que es la Palabra de Dios, es de donde sale el fundamento doctrinal en el cual se ha sostenido la Iglesia hoy y siempre. 
Habiendo quedado claro lo que la Biblia quiere decir cuando habla de fundamento de apóstoles y profetas, en el articulo “New Prophets to Head the Church”  (Los nuevos Profetas que lideraran la iglesia)  publicado por Let Us Reason Ministries se menciona a algunos escritores de este movimiento quienes hacen algunas de las afirmaciones mas extravagantes que sobre el tema hayamos escuchado: 
John Eckhardt: “Ellos (apóstoles y profetas) frecuentemente son los primeros en predicar ciertas revelaciones que Dios esta entregando a la Iglesia (Libro Movimiento apostólico, pagina 45) “Un Apóstol puede venir y establecer una nueva revelación” (Pág. 46)  
Prácticamente lo que aquí se esta señalando es que los nuevos “apóstoles y profetas” tiene autoridad para establecer principios doctrinales bajo supuestas revelaciones que puede incluso estar fuera de lo establecido por la palabra de Dios, La Biblia, esto es un precedente peligroso que puede abrir puerta a muchas aberraciones doctrinales que en este caso podrían ser justificadas en el marco de las supuestas revelaciones. La Biblia misma no nos da tales libertades. Veamos algunos versículos bíblicos que limitan tales prácticas al exponer claramente la suficiencia de la Biblia.  
2 Pedro 1:16-19 “Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fabulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad....Tenemos también la palabra profética mas segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro...” 
2 Timoteo 3:16-17 “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para reargüir, para corregir para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto enteramente preparado para toda buena obra”.  
El afirmar que a ellos, los nuevos apóstoles y profetas, se les ha dado la autoridad para establecer una nueva revelación y con ella doctrina,  es peligroso y también es echar por la borda algunos principios que al respecto están bien establecidos en la Palabra de Dios. Podemos preguntarnos ¿se puede hoy establecer una nueva revelación? Lewis Chafer en su Teología sistemática expresa lo siguiente con relación esta pregunta: 
“La revelación y la inspiración en si son doctrinas cardinales de la Biblia pero son frecuentemente confundidas, la confusión se debe en gran parte a que la inspiración y la revelación tienen que coincidir en un punto....La Biblia sin vacilación es el único sistema de verdad revelada. La revelación, que es la influencia divina directa que comunica la verdad al hombre y la inspiración que es la directa influencia divina que garantiza una correcta y fiel transferencia de la verdad en el lenguaje que otros puedan entender. (Chafer, Teología sistemática, Tomo 1, Pág. 51) 
Aquí se da a entender claramente, que aunque existe la revelación, no obstante, esta no puede ser transmitida sin error a menos que haya inspiración porque es esta ultima, la inspiración, la que protege del error la transmisión de la verdad revelada. La inspiración no obstante solo fue dada a los escritores de la Biblia y a nadie más, por lo tanto nadie fuera de los escritores bíblicos puede comunicar revelación sin error y por ende establecer doctrina.   
Continúa diciendo Chafer: 
“Es mas, multitudes de personas oyeron la voz de Dios cuando escucharon las misericordiosas revelaciones que constituyen la sustancia de la predicación de Cristo; pero ninguno de ellos, excepto los discípulos escogidos, fueron llamados para ejecutar las funciones de escritores inspirados”  (Ibb Pág. 51)  
Este movimiento de apóstoles y profetas modernos esta tomando el peligroso precedente que en el pasado tomo la Iglesia Católica Romana, quien afirma tener una autoridad extra Bíblica para establecer doctrina a través de los comunicados ex-cátedra de los papas quienes según afirma la doctrina de Roma, estos al hablar ex-cátedras pueden expresar sin error la revelación por la supuesta infalibilidad papal. 
En el Articulo “Los Nuevos apóstoles y Profetas que lideraran la Iglesia publicado por  Let Us Reason Ministries” Se publica algo que es interesante, este articulo afirma que  algunos lideres de este movimiento han dicho: “ la iglesia del siglo 21 será irreconocible en comparación con la iglesia del día de hoy, Los apóstoles y profetas de los últimos días que están vivos en el día de hoy tomaran la iglesia a través de la transición de la dispensación de la gracia a la dispensación del reino, de la dispensación de la iglesia mortal a la iglesia inmortal. (Trascripción de Bill Hamon Titulado Batalla de las novias, Nov. 1997.)  
Prácticamente este es el mismo razonamiento que aparece en la doctrina ocultista de la Teosofía, y también en el orden de idea del movimiento de la Nueva Era (New Age).  Además es importante señalar  que en este movimiento prácticamente se ignora el arrebatamiento de la iglesia, es necesario decir que las iglesias que han adoptado este sistema de doctrina muchas han terminado negando su posición premilenial al dejar de creer que habrá un levantamiento de la iglesia como lo afirma 1 Tesalonicenses 4:13-16, conforme a lo publicado en el articulo anterior la novia del cordero la iglesia, será transformada por los “apóstoles y profetas modernos”  y no por Jesucristo en su venida.
La Biblia nos habla bien claro de esa transformación por la resurrección de los muertos en Cristo, así como por la transformación en el momento del levantamiento de la Iglesia, como lo afirma 1 Tesalonicenses y 1 Corintios Cap 15.  De acuerdo a un articulo llamado La Nueva Reformacion apostólica, el Dr. Orrel Steinkamp nos dice: “De acuerdo a la sumarizacion de lo dicho por muchos de sus exponentes: La iglesia no se va a sentar mas a esperar ser helicopterizada del mundo en un plan de rescate. La iglesia estará aquí mismo por su autoridad espiritual desafiando a los principados y poderes en los lugares celestiales y poniéndolo debajo de sus pies”
Según la recopilación e investigación hecha por el Dr. Steinkamp del grupo de escritores que en día de hoy promueven el movimiento apostólico y profético, estos no están de acuerdo con la doctrina del rapto o levantamiento de la Iglesia, algunos abiertamente la rechazan otros sencillamente no tocan el tema. Muchos se han ido al amilenialismo, es decir al establecimiento del reino sin un milenio literal, que es la posición oficial de la iglesia Católica Romana, la cual enseña que la iglesia al final dominara al mundo y que el reino de lo cielos es el reinado de la iglesia. 
II.  Problema Bíblico Que confronta el movimiento apostólico-profético en el día de hoy 
Conforme a la definición de la Coalición Internacional de apóstoles ICA,  un apóstol: “Es un líder cristiano dotado, enseñado y comisionado y enviado por Dios con la autoridad de establecer el gobierno fundamental de la iglesia y en la esfera ministerial de escuchar lo que el Espíritu esta diciendo a las iglesias y estableciendo el orden adecuado para el crecimiento y la madurez de la iglesia.”(What is the New Apostolic Reformation?, Compiled by Renne Rodriguez)  
Si usted nota esta definición es muy general y un tanto ambigua respecto a lo que la Biblia nos enseña es un apóstol, si nosotros tomamos lo que la Biblia dice al respecto, no habría de extrañarnos porque, después de la muerte de Juan el apóstol cerca del año 100 después de Cristo no se establecieron nuevos apóstoles. Comencemos viendo:  
Hechos 1:21 “Es necesario, pues, que de estos hombres que han estado junto con nosotros todo el tiempo que el Señor Jesús entraba y salía entre nosotros, comenzando desde el bautismo de Juan hasta el día en que de entre nosotros fue recibido arriba, uno sea hecho testigo con nosotros, de su resurrección”   
Si usted nota, aquí el requerimiento para el apostolado, era ser testigo visual del ministerio de Jesús desde que fue bautizado en el Jordán hasta su traslado al cielo, después de su muerte y resurrección, Pablo que siempre defendió su apostolado daba testimonio de haber visto a Jesús personalmente y no solamente esto sino haber aprendido el evangelio por revelación directa de lo cual adolecen muchos de los “apóstoles” de hoy. 
1 Corintios 9:1 “¿No soy apóstol? ¿No soy libre? ¿No he visto a Jesús el Señor nuestro? ¿No soy vosotros mi obra en el Señor? 
Gálatas 1:11 “Mas os hago saber hermanos, que el evangelio anunciado por mi no es según hombre; pues yo ni lo recibí ni lo aprendí de hombre alguno, sino por revelación de Jesucristo”  
Nadie hoy puede decir que lo que aprendió del evangelio nadie se lo predico o enseño todo aquel que se ha convertido en el día de hoy lo ha hecho porque alguien le hablo lo que previamente había oído o aprendido de otro. Los apóstoles del señor, empero, tuvieron un aprendizaje directo, aquellos que se sentaron a los pies de Jesús por 3 años y luego Pablo quien no pudo aprender en el ministerio terrenal del Señor, no obstante, el tuvo instrucción directa del evangelio al igual que los demás. Se Preguntara usted, ¿entonces que me dice de Jacobo el hermano del Señor quien es llamado apóstol en Gálatas 1:19 y también Bernabé entre otros? 
La Palabra Apóstol, es la traducción del griego Apostolos (Apostolos) es literalmente uno enviado (apo) del partitivo Stello, enviar. Según Vine “Este Vocablo se usa con respecto al Señor Jesús para describir su relación con Dios, Hebreos 3:1, los 12 discípulos elegidos para recibir una instrucción especial fueron así designados Lucas 6:13; 9:10. Pablo, aun cuando había visto al Señor Jesús 1 Corintios 9:1; 15:8, no había acompañado a los 12 ‘todo el tiempo entre ellos’ Hechos 1:22 en base a su carencia de las condiciones necesarias para ello, Pablo recibió una comisión directa, por parte del Señor mismo, después de su ascensión para llevar el Evangelio a los Gentiles. Termina diciendo Vine en cuanto a otros nombrados apóstoles que aparecen en la Biblia fuera de los 12, como por Ej.; Bernabé Hechos 14:4,14,  Andronico y Junias Romanos 16:7, de Epafrondito en Filipenses 2:25 ‘vuestro mensajero’, en este sentido la palabra también se puede traducir como mensajero, conforme Vine la palabra Apostolado del griego Apostole (Apostole) que aparece en Hechos 1:25, Romanos 1:15, 1 Corintios 9:2 y Gálatas 2:8. Se traduce como un enviado, una misión o un apostolado (W.E. Vine, diccionario expositivo de palabras del Nuevo Testamento, Págs. 129 y130)  
Conforme a lo anteriormente expresado, la capacidad para establecer doctrina, solamente fue dada una sola vez a aquellos quienes recibieron la revelación y la inspiración para comunicar la verdad infalible revelada, es decir las Escrituras. Esto esta limitado solamente a ellos a los apóstoles originales.  
Fegurson lo describe magistralmente de la siguiente manera: 
“Ya que los apóstoles (excepto en el sentido de los delegados de las iglesias) fueron testigos de la resurrección y formularon el fundamento de la iglesia, resulta que su puesto era un fenómeno de la primera generación y que no podía repetirse; no tuvieron sucesores, y en principio no puede haberlos. No obstante, la iglesia puede y tiene que ser apostólica todavía, en el sentido que tiene que vivir de acuerdo con su enseñanza contenida en las Escrituras del Nuevo Testamento, y tiene que seguir su ejemplo de sufrir con su Señor. ....John Wesley declaro: “Algunos grupos episcopales tienen dirigentes que se nombran apóstoles a si mismos, pero también ellos dejan de reconocer que el apostolado se asocia con ser testigos originales de la resurrección” (Fegurson, Wright, Packer. Nuevo Diccionario De Teología, CBP, Págs. 86 y 87)
Como ya vemos una gran cantidad de autores cristianos en prácticamente todos los periodos de la iglesia han considerado el tema y están de acuerdo que los apóstoles originales son insustituibles, que una vez cumplido su ministerio, este se ha perpetuado en la iglesia, y la iglesia todavía continua bajo la autoridad de los apóstoles y profetas originales, con respecto a los profetas del Antiguo Testamento muchas profecías se han cumplido y en el día de hoy son históricas, otras están en cumplimiento o se cumplirán en un futuro inmediato por lo tanto los profetas originales aun están vigentes, de igual manera ocurre con los apóstoles, hombres inspirados para establecer en Cristo el fundamento de la iglesia, sus escritos inspirados no caducan porque es la Palabra de Dios por ende aun están vigentes y son irremplazables. 
El movimiento apostólico y profético del día de hoy no es otra cosa que algo bien orquestado para tomar control de la iglesia y es algo peligroso porque lleva el asunto a extremos extrabiblicos como podemos verlo en la definición que en su  recopilación sobre el tema Renne Rodriguez en su articulo expresa algunas cosas que al leerlo nos queda más que preguntamos ¿cual es la base bíblica para esto? citamos: 
“El actual movimiento apostólico es tan nuevo que considerable confusión ha surgido ¿Quien es un apóstol? ¿Son todos los apóstoles iguales? ¿Como ministra un apóstol? he aquí la terminología que me parece será de ayuda al menos por el momento: 
Apóstoles Verticales, apóstoles eclesiales (autoridad sobre numero de iglesias), apóstoles funcionales (ministerios en esferas especificas), apóstoles de equipo (ministran en conjunto con otros apóstoles) apóstoles congregacionales (pastores que pastorean iglesias de un numero superior a los 700 u 800s) 
Apóstoles Horizontales: apóstoles convergentes (llamado de autoridad conjunto en campo específicos) apóstoles embajadores (ministerio itinerante de catalizacion) apóstoles movilizados (autoridad para poner a trabajar junto cierto segmento del cuerpo de cristo) apóstoles Territoriales (autoridad sobre cierto segmento del cuerpo en la esfera de una ciudad o estado) 
Apóstoles de mercado (rol no definido aun). (What is the New Apostolic Reformation?, Compiled by Renne Rodriguez)
III.  Veamos Ahora  Efesios 4:11 
 Este es uno de los versículos que con respecto al tema esta causando controversia “Y el mismo constituyo a unos apóstoles; a otros profetas; a otros, evangelistas; a otros pastores y maestros”.
Este versículo es utilizado por la gente del movimiento  apostólico y profético para afirmar que es bíblico la función de los 5 ministerios en la iglesia de hoy, no obstante muchos de los mas connotados comentaristas y exegetas bíblicos tienen otra opinión al respecto e aquí lo que algunos importantes comentaristas dicen de Efesios 4:11 
John Wesley’s Explanatory Notes On the Whole Bible (Nota Explicatorio de Toda La Biblia por John Wesley) John Wesley fue uno de los lideres mas importantes de todos los tiempos (1703-1791)  fundador del metodismo, movimiento que fue de impacto y al día de hoy la iglesia Metodista es una de las denominaciones mas importantes en el mundo.  Wesley Comenta de Efesios 4:11 lo siguiente: 
“Y dentro de otros dones gratuitos, El dio a unos apóstoles - Sus ministros en jefes y testigos especiales, que les miraron después de su resurrección y recibieron su comisión inmediata de parte de El. Y algunos profetas y a otros evangelistas - Un profeta testifica de las cosas que vendrán; un evangelista de las cosas que han pasado antes que cualquier apóstol. Todos estos fueron oficios extraordinarios. Los ordinarios son. Pastores quienes vigilan el rebaño y algunos maestros, quienes son igual o de menor orden para asistirle a ellos conforme lo requiera la ocasión” 
People's New Testament 
Efesios 4:11 “Y el dio. Se ha mostrado previamente que Cristo ‘dio dones a los hombres’ (V.7,8) de esos dones hubo varios oficios. El objeto de esos oficios fue el promover ‘la unidad de la fe’ (V.13). Cristo ha elegido los oficios, y da a los hombres en la iglesia quienes son aptos para esos oficios. Es la responsabilidad de la iglesia el reconocer y llamar a los hombres que reúnen las condiciones que Cristo ha dado. Alguno para ser apóstoles. Los apóstoles fueron elegidos por Cristo. Todos tenían que ser testigos de su resurrección (Hechos 1.22). Por lo tanto no puede haber sucesores, pero su oficio continua.  Ellos aun siguen siendo maestros y autoridad por sus escritos y ejemplo. Y algunos profetas. El oficio inspirado, esencial en la iglesia por sus enseñanzas hasta que el Nuevo Testamento fuese completado. Y algunos evangelistas como el caso de Felipe (Hechos 8:4-12, 21:8.....Este oficio es para predicar el evangelio y será necesario todo el tiempo que la iglesia continué en la tierra. Este oficio no requiere dones extraordinarios, es permanente. Pastores y maestros. Estos no son oficios distintos, Obispos, o ancianos, son aquellos que especialmente ‘laboran en la palabra y en la doctrina’  el pastor siempre será un anciano. Todos estos oficios son dados con el propósito que se indica en el V.12, perfeccionar a los santos”. 
Matthew Henry (1662-1714) Uno de los mas grandes comentaristas de todos los tiempos. 
Efesios 4:11  “El Apóstol nos dice lo que Cristo dio en su ascensión: El Dios a algunos ser apóstoles, de hecho ya había establecido a algunos antes de su ascensión, Mateo 10:1-5, pero uno fue añadido, Hechos 1:26. Y todos ellos fueron solemnemente instalados y públicamente confirmados en su oficio, por la manifestación visible del Espíritu Santo de una manera extraordinaria sobre ellos. Note, que el gran don que Cristo dio a la iglesia a su ascensión fue el ministerio de paz y reconciliación.  El don del ministerio es el fruto de la ascensión de Cristo y los ministros tienen sus diferentes dones que fue dado a ellos por el Señor Jesús. Los oficiales que Cristo dio a su iglesia eran de dos porte ---Unos extraordinarios, avanzados a un oficio mayor en la iglesia: como fueron los apóstoles, profetas y evangelistas. Los apóstoles eran los jefes.  Estos fueron inmediatamente llamados por Cristo, envestidos de extraordinarios dones y el poder para obrar milagros y con la infalibilidad en la entrega de su verdad; y, ellos fueron testigos de sus milagros y doctrina, El los envió a ellos a expandir el evangelio y a plantar y crecer iglesias. Los profetas parece que son aquellos escritores del Antiguo Testamento, quienes identificaron las cosas que habrían de venir. Los evangelistas eran personas ordenadas (2 Timoteo 1:6) quienes los apóstoles tomaron como compañeros en sus viajes (Gálatas 2:1) y eran enviados a permanecer y a establecer iglesias como las que los apóstoles habían plantado (Hechos 19:22) estos no estaban fijos en ningún lugar en particular y generalmente continuaban hasta que eran reasignados, 2 Timoteo 4:9. ---Luego en segundo lugar vienen los ministros ordinarios empleados en una esfera mas limitada; como los pastores y maestros. Algunos toman estos dos nombres y lo asignan a un solo oficio, ambos son ordinarios y atañen al ministerio de la iglesia; los pastores son fijos y cabeza particular en las iglesias, designados para guiar, instruir y alimentar en la manera en que han sido designados por Cristo. Estos frecuentemente son llamados obispos y ancianos. Los maestros son aquellos que su trabajo es predicar el evangelio e instruir a la gente por la vía de la exhortación” 
The New John Gill Exposition of the Entire Bible
Dr. John Gill (1690-1771) Predico en la misma Iglesia que predico Spurgeon, pero 100 años antes se dice que el conocimiento que este hombre tenia son joyas de información que no se encuentran en ninguna parte fuera de los escritos antiguos judíos, se dice que sus conocimientos de los asuntos bíblicos eran tan profundo que son incomparables con respecto al conocimiento que cualquier ser humano que viva ahora pueda tener. Veamos pues que tiene que decirnos entonces el Dr. Gill con respecto al tema. 
Efesios 4:11 “Y El mismo estableció algunos apóstoles. . . . 
Esto es, El dio a ellos dones por los cuales fueron cualificados para ser apóstoles; estos fueron aquellos llamados en forma inmediata por Cristo, y obtuvieron la doctrina de el y fueron comisionados para predicarla; y era peculiar e infalible guiados  por el Espíritu de Dios y tenían el poder para obrar milagros por la confirmación de la doctrina; y tenían la autoridad para ir por todas partes y predicar el Evangelio y plantar iglesias sin estar confinados en ninguna parte o iglesia. Este era el primer y principal oficio en la iglesia y era de características extraordinarias, ahora ha cesado; y aunque los apóstoles existían antes de la ascensión de Cristo, empero no habían recibido la plenitud del Espíritu y los dones extraordinarios para desarrollar su oficio. . . . .  
Y a otros profetas. . . . . 
Otros significa, no miembros privados de la iglesia, quienes quizás todos profetizaban en una manera privada, tampoco ordinarios ministros de la palabra, empero ministros extraordinarios, quienes tenían el peculiar don de la interpretación de las Escrituras, las profecías del Antiguo Testamento y la capacidad de predecir las cosas que acontecerían, como fue Agabo y otros de la iglesia de Antioquia (Hechos 11:27, 13:1)
Commentary Critical and Explanatory on the Whole Bible
Efesios 4:11 “Del Griego enfático. El Mismo, por su poder supremo. Estableció alguno apóstoles ---traducción, ‘algunos para ser apóstoles, algunos para ser profetas’ estos hombres que ejercían este oficio, no eran menos que el oficio en si mismo, era un don divino ministros que no se ofrecieron a si mismo. Compárelo con la lista en 1 Corintios 12:10,28. Los apóstoles, profetas y evangelistas eran ministros especiales y extraordinarios, los ‘pastores y maestros’ eran ministros ordinarios de un particular rebaño, probablemente estaban incluidos los obispos, presbíteros y diáconos (Hechos 21:8) En contraste con los estacionarios pastores y maestros (2 Timoteo 4:5) los evangelistas fundaban la iglesia, los maestros la fortalecían en la fe y los pastores daban la guianza a la iglesia” 
The 1599 Geneva Study Bible 
Efesios 4:11 “Primero que nada se lista la función eclesiástica, que es en parte extraordinaria y por un periodo, tales como los apóstoles, profetas y evangelistas y la otra parte ordinaria y perpetua como pastores y maestros. 
Los apóstoles eran aquellos 12 a quienes luego fue añadido Pablo, cuyo oficio era plantar iglesias por todo el mundo, Los profetas cuyo oficio era uno de los principales quienes eran hombres llenos de sabiduría, los cuales podían predecir las cosas que habrían de venir. Los apóstoles les usaban como compañeros en la ejecución de su oficio, pastores los que gobiernan la iglesia y maestros los que gobiernan las escuelas” 
Coffman Commentaries on the Old and New Testament
Efesios 4:11 “Como Bruce observa hay 2 pares de oficios en vista aquí en primer lugar apóstoles y profetas, en segundo lugar evangelistas pastores y maestros. Los dos primeros fueron efectivos en la fundación de la iglesia y los segundos requeridos en todas las generaciones, la omisión de ‘algunos’ en lo que se refiere a maestro da lugar a la interpretación e maestro-pastor o pastor-maestro”
Conclusión
Como podemos ver hay una base muy amplia para con firmeza rechazar este movimiento ‘apostólico profético’ moderno que se ha levantado en los últimos años, es antibiblico en el sentido interpretativo, por los comentarios expuestos con respecto a los versículos comentados, Efesios 2:19-20 donde se habla de la iglesia basada en el fundamento de los apóstoles y profetas, esta claro que se esta refiriendo a la línea profética venida directamente del Antiguo Testamento, cuyas profecías son infalibles y palabra de Dios hasta el día de hoy y cuando se refiere a los apóstoles obviamente se refería a aquellos hombres escogidos para establecer la iglesia de Jesucristo. Como podemos observar en base a todos los comentaristas señalados anteriormente en sus comentarios de Efesios 4:12 todos ellos hacen mención de 2 esferas en los 5 ministerios allí señalados, la primera es que el oficio ministerial de apóstoles y profetas (algunos como ya vimos incluyen a los evangelistas, otros no) eran oficios extraordinario, limitado a un tiempo, es decir temporal, e intransferible; el cual estaba destinado a terminar cuado la iglesia hubiese sido establecida y la Palabra de Dios ya hubiese sido dada. Esta primera esfera o línea, termino con la muerte cerca del año 100 DC del Apóstol Juan. La Segunda esfera de los 3 ministerios restantes, evangelistas, pastores y maestros, eran oficio ordinario, no limitado al tiempo y transferible generacionalmente, por lo cual estos son permanentes y existe hasta hoy. Es un error por ende como ya hemos señalado tratar de implantar hoy de nuevo el oficio del apóstol y el profeta, a la manera que existieron al comienzo de la iglesia, los cuales son irremplazables y aunque estos ya murieron y su oficio termino, no obstante el fundamento establecido por ellos aun esta vigente y no se puede poner otro fundamento sobre el mismo. 


TODAS LAS SECTAS FALSAS TIENEN UN FUNDADOR


Los Testigos de …..tienen a Charles Russell
Los Aventistas  tienen a Elena de White
Los Mormones a J.Smith
Los Solo jesus a William Branham
Los católicos a Constantino, con él comenzó la religión católica.
La denominación pentecostal a Charles Parham
El nuevo movimiento apostólico a Peter Wagner
La verdadera y única Iglesia de los redimidos tiene como fundador a los Profetas, Apóstoles y a JESUCRISTO  la Piedra angular!!
El movimiento apostólico y profetico con su CAP: conferencia apostólica y profetica, una ilusión de los apóstatas!!!
Conozca su origen:
Mucha confusión esta generando en el día de hoy la interpretación de Efesios 4:11 que dice:” Y el mismo constituyo a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros evangelistas; a otros, pastores y maestros”  
La confusión radica en que muchos se preguntan si en verdad existen en el día de hoy apóstoles y Profetas, es alrededor de esos dos ministerios que surge la confusión, porque no es cuestionado el ministerio de Evangelista Pastor, y Maestro.  
En el día de hoy se han levantado grupos y personas que se hacen llamar apóstoles y profetas, los cuales reclaman ser las “cabezas o autoridad apostólica” de la iglesia en general en determinada ciudad o región, se proclama que  dichas iglesias unidas bajo la “autoridad apostólica” supuestamente estarían llamadas a derribar toda barrera denominacional para venir a estar bajo la autoridad de los “apóstoles Y Profetas”.  
Hoy en nuestra ciudad de Houston la confusión es tal que la iglesia esta dividida ante este asunto. Es por ello que Debido a la trascendencia del tema y a la popularidad de nuestro programa radial, muchas personas constantemente me preguntan sobre el tópico, por lo tanto he creído necesario poner algunas cosas que a mi parecer son relevantes con respecto al tema, poniéndolo en perspectiva con algunas cosas que al respecto se han publicado.  
I.  Entendiendo El Problema 
Leyendo hace poco un articulo titulado “New Prophets to Head the Church by  Let Us Reason ministries” (Los nuevos Profetas que lideraran la iglesia), el autor relata  algo que a mi parecer es sorprendente, el dice que en el año 2,000 mientras miraba en una de las cadenas cristianas de televisión una entrevista con uno de los mas connotados lideres de este movimiento de apóstoles y profetas modernos (Peter Wagner) le escucho decir: 
 “Creo que el gobierno de la iglesia finalmente ha llegado al lugar que las escrituras afirman en Efesios 2 donde habla del fundamento de la iglesia que son los apóstoles y profetas, previo a la década de los 80s y 90s estos fueron prácticamente ignorados pero ahora por haberlo reconocido es la mayor razón por la cual estamos entrando en un nuevo nivel de oración, de guerra espiritual, de sanidad, milagros y liberación. Esta es una nueva era, yo no se si es coincidencial a medida que entramos en un nuevo milenio” (énfasis añadido.) 
Al nosotros observamos dicha afirmación, en ella se da implica que la iglesia estuvo estancada hasta los años 80s y 90s, como si estuviese esperando el descubrimiento y lanzamiento del ministerio apostólico y profético. La realidad es que en estos 20 siglos que tiene la iglesia de existencia, Dios en su soberanía y su plan eterno siempre ha obrado su voluntad y nada se le ha salido de la mano. Durante todos estos siglos hubo periodos de oscuridad pero también tiempo de gran luz, tiempo de evangelización, conversión y avivamientos por doquier. Jesús dijo “Estableceré mi Iglesia y las puertas del hades no prevalecerán contra ella”  
Cuando estos apóstoles modernos afirman: “La Iglesia finalmente ha llegado al lugar que las escrituras afirman en Efesios 2” parece ser que dan a entender que la iglesia ha estado sin fundamento en estos 2,000 años de existencia o que el plan de Dios para con su iglesia  no se ha podido llevar a cabo, de ser así, entonces el evangelio seria el fracaso mas grande que jamás haya existido si en dos mil años Cristo no ha podido fundamentar su iglesia. Mas bien parecería que el movimiento apostólico moderno ha mal interpretado Efesios Cap 2:19-20 que literalmente dice: “así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos de los santos, y miembros de la familia de Dios, edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo  Jesucristo mismo” 
Si usted nota aquí se nos habla de nuestra posición en Cristo como creyentes y cuando se habla del fundamento de apóstoles y profetas no se esta hablando de autoridad jerárquica eclesiástica, sino mas bien se esta hablando del crecimiento o madurez que el creyente obtiene cuando es edificado en la doctrina de los apóstoles y profetas es decir en la doctrina de aquellos hombres que recibieron la inspiración, la revelación de la palabra que es la Biblia la Palabra de Dios.   
De ello hablo Jesús en Juan 15 cuando dijo “Tengo muchas cosas que decirles pero todavía no la pueden llevar pero cuando venga el consolador el Espíritu de Verdad, el tomara de lo mió y os lo hará saber” En este versículo se entiende que el tomar de lo de el y hacerlo saber, en ello esta incluido la inspiración y revelación de las Escrituras. A ello se refiere Judas cuando no llama a “contender por la Fe dada una vez a los santos” Fe en este sentido es conjunto de doctrina que fue dada una sola vez, no muchas veces sino una sola. Esa fe o doctrina, es el fundamento de los apóstoles y profetas de los cuales nos habla Efesios 2:20  
Veamos como algunos de los mas renombrados eruditos bíblicos han interpretado Efesios 2:20 con respecto al fundamento de los apóstoles y profetas.