domingo, 4 de diciembre de 2016

ORIGEN DEL NUEVO MOVIMIENTO APOSTÓLICO

DIOS le bendiga amado hno., conoce usted el origen del movimiento nuevo apostólico?
Oro para que EL ESPIRITU SANTO abra sus oídos y ojos espirituales, y le de corazón entendido, le de fuerzas para renunciar y denunciar este movimiento, producto del reino de las tinieblas.
Primer parte.
Si 1901 fue un gran año para el movimiento carismático, el 2001 fue
potencialmente aun mayor. La primera fecha marca el comienzo del movimiento
pentecostal moderno, cuando Agnes Ozman supuestamente habló en lenguas
durante una reunión de oración en Topeka, Kansas. Sin embargo, esta última
fecha, exactamente un siglo después de la primera, representa algo mucho más
grande en las mentes de algunos líderes carismáticos que afirman que el 2001
«marcó el comienzo de la Segunda Era Apostólica».1 Esta es la descripción
utilizada por C. Peter Wagner, misiólogo, autor popular y cronista de los
acontecimientos recientes carismáticos. Él cree que a principios del siglo
veintiuno se produjo un cambio trascendental en el plan redentor de Dios.
Según Wagner: «Ahora estamos viendo ante nuestros ojos el cambio más
radical en la forma de hacer iglesia desde la Reforma protestante. De hecho, creo
que podría exponer un argumento razonable de que en realidad puede llegar a ser
un cambio más radical».2 Los albores del siglo veinte pueden haber señalado un
interés renovado en los dones milagrosos, pero el nuevo milenio supuestamente
marcó el comienzo de algo aun más significativo: el regreso de los apóstoles.3 En
palabras de Wagner, ahora hay «un amplio reconocimiento de que el oficio del
apostolado no fue solo un fenómeno del primer par de siglos de la historia de la
iglesia, sino que también está funcionando en el cuerpo de Cristo hoy».4
Wagner le llama a esta afluencia moderna de liderazgo apostólico la Nueva
Reforma Apostólica. Él define el movimiento de esta manera:
El nombre que he elegido para este movimiento es la Nueva Reforma
Apostólica. Uso la palabra «Reforma», porque como he dicho, creo que
por lo menos iguala a la Reforma Protestante en su impacto global.
«Apostólica», porque el más radical de todos los cambios es el
reconocimiento generalizado del don y el oficio de apóstol en las iglesias
de hoy, y «Nueva» para distinguir el movimiento de una serie de
denominaciones que utilizan la palabra «apostólico» en sus nombres
oficiales a pesar de que muestran patrones comunes de las iglesias más

tradicionales, en vez de las nuevas.5
Después de haber decidido que todavía hay apóstoles en la iglesia de hoy —
basándose en un puñado de modernas «profecías» y un consenso de los
panelistas en el Simposio Nacional de 1996 sobre la iglesia postdenominacional,
organizado por el Seminario Teológico Fuller— Wagner se ha embarcado desde
entonces en la misión de ver que el oficio apostólico sea plenamente aceptado por
la iglesia contemporánea. Él cree que en cada generación de la historia de la
iglesia siempre ha habido individuos que poseían el don de apostolado, pero
sostiene que solo recientemente fue posible «que una gran cantidad de apóstoles
se desarrollara, en el 2001, el año que he optado designar como el comienzo de la
Segunda Era Apostólica».6 Según Wagner, los cristianos contemporáneos
«pueden comenzar a acercarse a la vitalidad espiritual y el poder de la iglesia del
primer siglo solo si reconocemos, aceptamos, recibimos y ministramos todos los
dones espirituales, incluyendo el don del apóstol».7
Históricamente, el nombre «apóstol Pedro» se ha reservado para un solo
individuo. Simón Pedro, el líder reconocido de los doce discípulos, cuyo
ministerio apostólico se ofrece en Hechos 1—12. Sin embargo, en la Nueva
Reforma Apostólica, este nombre ha sido adoptado por nadie más que el mismo
Peter Wagner.8 Wagner comenzó a reconocer su «apostolado» en 1995, cuando
dos profetisas declararon que había recibido una unción apostólica. En 1998, su
llamado apostólico fue confirmado por una palabra profética en una conferencia
en Dallas. Él narra las circunstancias un tanto extrañas que rodean este caso:
Me hallaba sentado en la primera fila […] cuando de una u otra manera
me encontré de rodillas en la plataforma con Jim Stevens de Christian
Internacional, que se preparaba para profetizar sobre mí en público.
¡Todavía no sé cómo llegué allí! Levanté la vista y ahí estaba Charles
Doolittle, uno de nuestros intercesores reconocidos, de pie junto a mí.
¡Charles era oficial de la policía de Glendale, California, un
afroamericano musculoso y de casi dos metros de estatura, con un
aspecto agresivo en su rostro y que sostenía una enorme espada como de
un metro por encima de mi cabeza! Rápidamente decidí que mejor me
portaba bien y escuchaba con atención [a] lo que Jim Stevens tenía que
decir […] He considerado desde entonces que este momento fue mi
ordenación profética como apóstol.9
Poco tiempo después, y como prueba de su ordenación apostólica, Wagner
afirma haber terminado con la enfermedad conocida como «el mal de las vacas
locas» en Europa. En sus propias palabras:

Sabía que Dios quería que tomara la autoridad apostólica que me había
dado y decretara de una vez por todas que la enfermedad de las vacas
locas llegaría a su fin en Europa y el Reino Unido, lo cual hice […] Esto
fue el 1 octubre de 2001. Un mes más tarde, un amigo mío me envió un
artículo de un periódico de Inglaterra diciendo que la epidemia se había
contenido y que el último caso de la enfermedad de las vacas locas había
sido el 30 de septiembre de 2001, ¡el día antes del decreto apostólico!10
Dado su entusiasmo, Wagner al parecer no es consciente del hecho de que la
enfermedad todavía existe en Europa, de forma que se registraron sesenta y siete
casos positivos de vacas infectadas en el 2009 solamente.11 Si bien es cierto que
los esfuerzos de control agresivos por parte de los gobiernos europeos han
frenado de modo significativo la epidemia de las vacas locas, la idea de que la
declaración apostólica de Wagner terminó con la enfermedad es evidentemente
falsa.
En el año 2000, Wagner comenzó a dirigir la recién formada Coalición
Internacional de Apóstoles con él como «apóstol presidente», un cargo que
ocupó hasta el 2009, cuando cambió su título a «presidente apóstol emérito».12
Según el historiador pentecostal Vinson Synan, cuando comenzó la coalición,
«los nuevos apóstoles podían unirse y pagar sesenta y nueve dólares al mes
como cuota de membresía».13 El mismo Synan fue invitado por Wagner a unirse,
pero declinó. Como Synan explica: «No me considero apóstol, le escribí que por
sesenta y nueve dólares al mes, “no podía darme el lujo de serlo”».14 Las tasas
de afiliación a finales del 2012 variaron ligeramente, dependiendo del país de
residencia del apóstol. La tarifa base es de trescientos cincuenta dólares para los
«apóstoles internacionales». El costo para los apóstoles que viven en América del
Norte comienza en cuatrocientos cincuenta dólares por año, o seiscientos
cincuenta para los apóstoles casados (lo que significa, al parecer, un equipo de
marido y mujer, en el que ambos se consideran a sí mismos apóstoles). Los
estadounidenses nativos («apóstoles de la primera nación») podrían unirse por la
misma tarifa que un «apóstol internacional».15
En un intento por organizar el Nuevo Movimiento Apostólico, Wagner
delimita dos categorías principales de «apóstol», junto con varias subcategorías.
Los «apóstoles verticales» sirven como líderes de los distintos ministerios o redes
ministeriales, mientras que los «apóstoles horizontales» ayudan a reunir a los
líderes de igual nivel para diversos fines. Wagner sugiere que Pedro y Pablo
fueron ejemplos de «apóstoles verticales» en el Nuevo Testamento, debido a la
naturaleza de sus respectivos ministerios y a las redes de la iglesia que cayeron
bajo el cuidado de su pastorado. Por el contrario, Santiago, el hermano de
nuestro Señor, fue un ejemplo de un «apóstol horizontal», ya que reunió con éxito a los otros apóstoles en el Concilio de Jerusalén.16
Las categorías apostólicas incluyen: miembros de un equipo apostólico,
funcional, eclesiástico; apóstoles congregacionales; apóstoles de convocatoria,
embajadores, movilizadores y territoriales; apóstoles del mercado; y apóstoles por
llamado.17 Busque en el Nuevo Testamento cualquiera de estas denominaciones
y descubrirá rápidamente que no están allí.
Sin embargo, la Nueva Reforma Apostólica está ganando terreno
rápidamente en el seno de la corriente principal de las iglesias carismáticas y de la
Tercera Ola. Como un autor explica: «Es una creencia característica de tales
iglesias nuevas que el Espíritu Santo está restaurando actualmente los cinco
ministerios de Efesios 4.11: apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y
maestros. Sin embargo, la atención se centra en los ministerios de apóstol y
profeta, porque el mundo evangélico ya estaba acostumbrado a los ministerios del
evangelista, pastor y maestro».18 Wagner se complace en el hecho de que el
Nuevo Movimiento Apostólico es parte del segmento de más rápido crecimiento
del cristianismo, viéndolo como un signo de la afirmación divina.19
En base a este crecimiento, Wagner sostiene que un cambio enorme y
fundamental está teniendo lugar dentro de la iglesia; uno que compara con la
transición del antiguo pacto al nuevo pacto.20 Él va tan lejos como para comparar
la Nueva Reforma Apostólica a los «odres nuevos» del nuevo pacto, diciendo:
«Hoy hemos entrado en otro odre nuevo, al que yo llamo la Segunda Era
Apostólica. Los cambios radicales en la forma de hacer iglesia no se encuentran
al doblar de la esquina, ya están aquí con nosotros».21
Los que refutan la Nueva Reforma Apostólica son, en opinión de Wagner,
como los fariseos: en vez de aclamar y bendecir el nuevo odre, lo rechazan.22 Él
afirma, además, que los que se oponen a su nuevo movimiento están bajo la
influencia demoníaca: «Satanás intenta impedir los nuevos tiempos y las
estaciones de Dios enviando espíritus demoníacos del mal a trabajar sobre todo
en nuestras mentes. Si tienen éxito, empezamos a pensar mal de los nuevos odres
que Dios desea desarrollar».23 Por lo tanto, cualquier persona que está en
desacuerdo con las premisas de Wagner —que él y otros líderes carismáticos
modernos son «apóstoles»— resultan catalogadas de legalistas, demonizadas, o
simplemente tienen demasiado miedo para abrazar una nueva era radical en la
historia de la iglesia.


lunes, 24 de octubre de 2016

CONOCIENDO EL ORIGEN DEL MOVIMIENTO PENTECOSTAL


AMADOS HNOS.EN CRISTO, DESEO  CON TODO MI CORAZÓN QUE ESTE ESCRITO SEA DE BENDICIÓN, EDIFICACIÓN Y CLARIDAD, QUE EL SEÑOR ABRA SUS OJOS ESPIRITUALES Y LA VALENTÍA DE RENUNCIAR A TANTAS MENTIRAS QUE NOS ENSEÑARON LOS SEMINARIOS E INSTITUTOS DE TEOLOGIA. Y ASI PREDICAR CON SABIDURIA LAS SAGRADAS ESCRITURAS!!!


EL MOVIMIENTO PENTECOSTAL-SUS ORIGENES 1
Desde su nacimiento el movimiento Pentecostal de la “lluvia tardía” ha sido caracterizado por la herejía doctrinal, la exageración, y el engaño. Comprendo que esas son duras palabras, pero la documentación es irrefutable. Esto es a causa de que los milagros mesiánicos y apostólicos de la primer centuria simplemente no están siendo concretados por los Cristianos hoy. Aquellos que pretenden que los signos apostólicos Pentecostales han sido restaurados son forzados a recibir como señales apostólicas a fenómenos ocultistas e hipnóticos tales como el matar del Espíritu y la embriaguez del Espíritu y la adivinación (que ellos frecuentemente llaman “palabra de conocimiento”), o son forzados a exagerar y prefabricar las pretendidas señales. Esto es exactamente lo que nosotros vemos ocurrir en la última manifestación del movimiento de la lluvia tardía: el Avivamiento de la Risa. El movimiento de la lluvia tardía del siglo 20 está literalmente regado con los escombros de la confusión espiritual, el error, y el engaño.
Algunos protestarán que nosotros estamos usando excepciones para pintar el movimiento entero. Por favor note, sin embargo, que las personas que se verán en lo que sigue son líderes reconocidos dentro del movimiento Pentecostal. Ellas no son excepciones. Todas ellas están listadas en el autoritativo Diccionario de los Movimientos Pentecostal-Carismático y muchas otras historias del Pentecostalismo que están en mi biblioteca. Más aún, el Señor Jesucristo advirtió que nosotros debemos juzgar a los maestros por sus frutos (Mateo 7:15-18). Un movimiento cuyas pretensiones de ser la mismísima plenitud del Espíritu Santo pero que está literalmente regado con la falsa enseñanza, la engañosidad, la inmoralidad, y la locura es para ser rechazado.
Reconozco prontamente que hay muchas personas Cristianas piadosas dentro del Pentecostalismo. Yo fui guiado a Cristo exactamente por un hombre así. Hay piadosos predicadores Pentecostales tales como el Dr. Joseph Chambers de Charlotte, North Carolina, quien ha tomado una fuerte postura contra la locura del Avivamiento de la Risa. Tengo mucho respeto por el Dr. Chambers, aunque yo rechazo su teología Pentecostal. Su congregación perdió propiedades valuadas en 3 millones de dólares a causa de que él tomó posición contra las cosas antiescriturales en su propia denominación, la Iglesia de Dios (Cleveland, Tennessee), y esa denominación tomó de ellos las propiedades en una corte. Aunque yo respeto tal posición por la verdad como ellos la entienden, yo creo que la doctrina Pentecostal de la lluvia tardía y la falsa enseñanza sobre la continuidad de los dones de señales son el error fundacional que ha resultado en la locura que nosotros describiremos en el siguiente examen.
No todos los Pentecostales están caracterizados por el engaño y el extremismo, pero la antiescritural doctrina Pentecostal se presta en sí misma para tales cosas. Yo creo eso con todo mi corazón, aunque tengo simpatía por muchas facetas del Pentecostalismo de la vieja línea, pues yo alabo al Señor por su atrevido celo por Dios, por su deseo de ver un “real” Cristianismo del Nuevo Testamento, por su expresiva y exuberante adoración, por su fe en Dios y por su deseo de tomar seriamente cada palabra en la Biblia, por su confianza en el poder de Dios de obrar milagros, y por su celo de ser separados del mundo. No puedo, sin embargo, ir más allá hasta un compañerismo en el ministerio aún con los Pentecostales del viejo estilo, a causa de que ellos están construyendo sobre un fundamento doctrinal que no sólo es antiescritural, sino que involuntariamente ha resultado en la preparación de la apóstata única “iglesia” mundial de los tiempos del fin.
Ahora discurramos en un paseo a través de las páginas de la historia Pentecostal.
JHON ALEXANDER DOWIE
Uno de los más influyentes centros en la antigua historia Pentecostal fue LA CIUDAD DE SION, fundada en 1900 por JOHN ALEXANDER DOWIE (1847-1907). Aunque Dowie mismo no aceptaba el bautismo del Espíritu con la teología de las lenguas, él es llamado “el padre del avivamiento de sanidad en América” (Harrell, All Things Are Possible, p. 13). Su teología del milagro de los últimos días ayudó a preparar el terreno para el Pentecostalismo, y la teología Pentecostal se introdujo en sus instituciones rápidamente aún antes de su muerte. Muchos influyentes líderes Pentecostales surgieron de su movimiento. Su revista Hojas de Sanidad, tuvo una distribución mundial y una vasta influencia. Dowie enseñó que la sanidad es prometida en la expiación, [N.T.: la expiación del sacrificio de Cristo], e insistió en que aquellos que buscaban sanidad de fe dejaran todo cuidado médico. Él vio a los farmacéuticos y médicos como instrumentos del diablo. Cuando su propia hija fue severamente quemada después de chocar accidentalmente con un lámpara de alcohol, él proscribió a uno de sus seguidores por tratar de aliviar su dolor con Vaselina. El rehusó permitirle a ella cualquier tratamiento médico y ella murió en esa condición. Muchos otros que vinieron a su casa de cura de fe murieron de sus enfermedades sin ninguna atención médica. En 1895 él fue acusado de homicidio involuntario y negligencia por la ciudad de Chicago y condenado, pero los tribunales más altos decretaron que la condena fue inconstitucional. Él requirió que sus seguidores dejaran el uso de todo producto de carnes de cerdo. El gobernó su Ciudad de Sión con mano de hierro y fue notable por su irresponsabilidad en lo financiero y por un amor por la lujuria personal. En 1901 reclamó que él era Elías el Restaurador, y en 1904 “dijo a sus seguidores anticipar la plena restauración del Cristianismo apostólico y reveló que había sido divinamente comisionado como el primer apóstol de una renovada iglesia de los tiempos del fin” (Diccionario de los Movimientos Pentecostal-Carismático, p. 249). En los últimos pocos años de su vida fue acusado de irregularidades sexuales, sufrió un golpe que lo dejó inválido, y su Ciudad de Sión fue declarada en bancarrota. Por seis meses antes de su muerte yació en un estado de total postración.
A pesar de las heréticas doctrinas de Dowie y de su antiescritural ministerio, él preparó el camino para Charles Parham y su igualmente antiescritural Pentecostalismo. El Diccionario de los Movimientos Pentecostal-Carismático nota que muchos de los más famosos evangelistas Pentecostales surgieron de Sion (p. 368) y docenas de los seguidores de Parham en Sion se unieron a las Asambleas de Dios en su formación en 1914. De hecho, tres de los originales ocho miembros del concilio general de las AOG [N.T.: Assemblies of God, Asambleas de Dios] fueron de la Ciudad de Sion (p. 370). Aquellos que surgieron de la Ciudad de Sion para llegar a ser influyentes en el movimiento Pentecostal incluyeron a F. F. Bosworth, John Lake, J. Rosewell Flower, Daniel Opperman, Cyrus Fockler, Fred Vogler, Marie Burgess Brown, William Piper, F. A. Graves, Lemuel Hall, Martha Robinson, Gordon Lindsay, y Raymond Richey. El influyente ministro de las Asambleas de Dios Gordon Lindsay, editor de La Voz de la Sanidad, escribió la biografía de Dowie dándole el crédito por influenciar “una hueste de hombres de fe que han tenido un poderoso ministerio”, refiriéndose a las generaciones de predicadores Pentecostales.
MARIA BEULAH WOODWORTH-ETTER
La evangelista sanadora de fe MARIA BEULAH WOODWORTH-ETTER (1844-1924) tuvo una vasta influencia en el temprano movimiento Pentecostal. El Diccionario de los Movimientos Pentecostal-Carismático dice que “ella fue una monumental figura en términos de difundir el mensaje pentecostal” y nota que “la mayoría de los primeros Pentecostales miraron a Woodworth-Etter como una enviada de Dios al movimiento y la aceptaron sin crítica”. Cuando ella condujo un cruzada de sanidad de cinco meses en Texas para F. F. Bosworth, “la lista de influyentes pentecostales que viajaron en tropel a Dallas fue igual a un “Quién es Quién” del temprano Pentecostalismo” (Ibid., p. 365). Sus encuentros estuvieron caracterizados por el matar del espíritu, profecía, trances, y el pandemónium generalizado. “Ella frecuentemente estuvo en trances durante un servicio, parada como una estatua por una hora o más con sus manos levantadas mientras el servicio continuaba” (Diccionario del Pentecostal, p. 901). Fue entonces apodada “la evangelista del trance” y la “sacerdotisa budú”. Profetizó falsamente que el área de la Bahía de San Francisco sería destruida por un terremoto y una ola de marea en 1980. Aceptó una invitación de los Mormones para predicar en Nebraska en 1920.
CHARLES PARHAM
Como vimos en el principio de este reporte, los Pentecostales generalmente trazan su herencia hasta la Escuela Bíblica Bethel de CHARLES PARHAM en Topeka, Kansas, donde Agnes Ozman comenzó a hablar en “lenguas” en 1901 cuando recibió una imposición de manos. Fue pretendido (aunque no creíblemente confirmado) que Ozman habló en Chino por tres días, inhábil para hablar Inglés, y en el segundo día ella habló en Bohemio. Pronto, la mayoría de los otros en la escuela estuvieron hablando y cantando “en lenguas”. Parham reclamó que profesores de lenguaje y otras personas educadas lingüísticamente confirmaron que las lenguas fueron lenguajes, pero ello no fue confirmado fuera del movimiento. Los reporteros de los diarios de esa época describieron el fenómeno meramente como “jerigonza”. En 1914, Charles Shumway diligentemente buscó evidencia para probar que las primeras lenguas Pentecostales fueron lenguajes reales. Él falló en encontrar aún una persona para corroborar las pretensiones que habían sido hechas (James Goff, Jr., Fields White Unto Harvest, Fayeteville: University of Arkansas Press, 1988, p. 76). “En su disertación de 1919 para Doctorado en Filosofía, Shumway censuró al Crónica de Houston local como reporteros crédulos y afirmó que “hay cartas en manos de varios hombres que fueron intérpretes del gobierno en o cerca de Houston en aquel tiempo [cuando Parham condujo un escuela bíblica allí], y ellas son unánimes en negar cualquier conocimiento de los hechos alegados” (Goff, p. 98). “Los estudiantes de la escuela bíblica de Parham anotaron extraños escritos que ellos pretendían que eran el producto del don de lenguas. Ellos reclamaron que esos escritos eran lenguajes extranjeros, tales como Chino, pero cuando fueron examinados por personas conocedoras, fueron encontrados ser meros trazados indescifrables (Goff, p. 76). La prensa llamó a esos escritos “extraños e irreconocibles jeroglíficos” (Ibid., p. 80).
Parham estuvo tan entusiasmado que dijo que misioneros irían hasta los fines de la tierra y no tendrían que aprender los lenguajes. De hecho, la mayoría de los tempranos Pentecostales creían eso. Sin embargo eso no funcionó así. Cuando A. G. Garr viajó a India e intentó hablar al pueblo en lenguas sobrenaturales, encontró en seguida que no podía comunicarse.
Como vimos al comienzo de este reporte, Parham, el fundador del Pentecostalismo, estaba penetrado con herejías doctrinales. El creyó en la aniquilación de los no salvos y negó la doctrina bíblica del tormento eterno. El creía en la antiescritural doctrina del anglo-Israelismo. El enseñó que hubieron dos creaciones separadas, y que Adán y Eva fueron de una raza diferente que la gente que supuestamente vivió fuera del Jardín del Edén. La primera raza de hombres no tuvieron almas, afirmó él, y esta raza fue la gente desprovista de alma que fue destruida en el diluvio. Parham creía que aquellos que recibieron el bautismo del espíritu de los últimos días y hablaron en lenguas completarían la novia de Cristo y tendrían un especial lugar de autoridad al retorno de Cristo. Él creía en un rapto parcial compuesto de habladores de lenguas.
Parham creía que la sanidad física es el derecho de nacimiento del Cristiano. Una reciente publicación de la revista Historia Cristiana (Publicación 58, Vol. XVII, No. 2, 1998) contiene una foto de Parham y siete de sus seguidores de pie en los escalones del palacio de justicia de Carthage, Missouri. El año fue 1906. Parham está sosteniendo un asta con carteles que dicen “Unidad Apostólica”. Los otros sostienen carteles que dicen “Verdad, Fe, Vida, Victoria, SALUD”. Ellos estaban haciendo una afirmación de su posición doctrinal de que la salud es una parte garantizada de la vida Cristiana apostólica.
A pesar de que su enseñanza fue siempre que la voluntad de Dios es sanar y que la medicina y los doctores deben ser rehuidos, uno de los hijos de Parham murió a la edad de 16 de una enfermedad de la cual no fue sanado. Su otro hijo murió a la edad de 37. La mayoría de aquellos que concurrieron a las reuniones de Parham no fueron sanados. En Octubre de 1904 una niña de nueve años llamada Nettie Smith murió. Su padre fue un ávido seguidor de Parham y rehusó el tratamiento médico para su hija. La muerte de Nettie tornó la opinión pública local contra Parham a causa de que la enfermedad de la pequeña niña era tratable y por lo tanto la comunidad consideró su muerte innecesaria. Parham mismo sufrió varias enfermedades a través de su vida y a veces estuvo demasiado enfermo para predicar o viajar. Por ejemplo, el pasó el invierno entero de 1904-05 enfermo y en cama (James Goff Jr., Fields White Unto Harvest, p. 94), a pesar de su propia predicación de que la salud está garantizada en la expiación. Parham fue el primer predicador Pentecostal en orar sobre pañuelos y enviarlos a quienes desearon su ministración (Goff, p. 104).
En 1908 Parham levantó fondos para viajar a la Tierra Santa en una expedición arqueológica para la búsqueda del arca perdida del pacto. Él pretendió ante la prensa que tenía información sobre su localización y que su hallazgo del arca encajaría en el esquema bíblico de los tiempos del fin. Por Diciembre él anunció que tenía los fondos suficientes y viajó a New York supuestamente para comenzar su jornada a Jerusalén. El nunca compró un ticket al Medio Oriente y retornó a casa abatidamente en Enero pretendiendo que había sido robado luego de su arribo a New York.
Parham intentó influenciar o aún posiblemente apoderarse del extraño ministerio de Alexander Dowie, el hombre al que el Diccionario de los Movimientos Pentecostal-Carismático llama el padre del moderno evangelismo de sanidad, en su Ciudad de Sión al norte de Chicago. Dowie se proclamó a sí mismo Elías el Restaurador y el primer apóstol de la iglesia de los tiempos del fin.
Recordamos a nuestros lectores que en la mayoría de las historias Pentecostales Parham es enlistado como uno de los principales padres fundadores del Pentecostalismo.
FRANK SANDFORD
Uno de los mentores de Charles Parham fue FRANK SANDFORD, quien manejó la “Escuela Bíblica del Espíritu Santo y Nosotros” en Lancaster, Maine. Sandford promovió una teología del tipo de la lluvia tardía y se eforzó por retornar a la “vida y poder apostólicos”. Sandford compró dos barcos e intentó hacer un viaje misionero al África. Una nave naufragó lejos de la costa Africana, y cada uno fue trasladado a la otra nave. Sanford estuvo a cargo, pero debido a necias decisiones que él atribuyó a la guía de Dios, nueve de sus miembros de la tripulación murieron en el viaje de retorno por falta de comida y agua. Esto fue en 1911. La malamente predestinada jornada misionera duró cuatro meses. Sandford fue subsecuentemente acusado de homicidio involuntario y sentenciado a 10 años en una penitenciaría federal.
LA MISIÓN DE LA CALLE AZUSA
El hombre que fundó la famosa MISIÓN DE LA CALLE AZUSA en los ángeles fue el evangelista negro WILLIAM SEYMOUR. El historiador Pentecostal Vinson Synan dijo: “El avivamiento de la calle Azusa es comúnmente considerado como el comienzo del moderno movimiento Pentecostal. ... En adición a los ministros que recibieron su experiencia Pentecostal directamente en la Calle Azusa, miles de otros fueron influenciados indirectamente”. (Synan, The Holiness-Pentecostal Tradition, pp. 105, 130). Durante 1901 y 1902 Seymour concurrió a la “Escuela de la Biblia de Dios” de Martin Knapp y se unió a los “Santos de la Luz de la Noche” en Cincinnati. Él adoptó la falsa doctrina de la santidad de la entera santificación, creyendo que eran requeridas dos “obras de la gracia” para salvar y purificar un hombre. Uno debe ser nacido de nuevo a través de la fe en Cristo, pero luego uno debe subsecuentemente ser santificado a través de una segunda obra de gracia.
Seymour creyó que la verdadera iglesia estaba siendo restaurada en un avivamiento del milagro de los tiempos del fin. En 1903 él concurrió a la Escuela Bíblica de Charles Parham en Houston, Texas. Allí él llegó a comprometerse con otra falsa doctrina, que el Cristiano debe ser posteriormente “bautizado en el Espíritu Santo con la evidencia inicial de las lenguas”. En el temprano 1906 Seymour fue invitado a Los Ángeles para pastorear un pequeño grupo de santidad que, en el tiempo de la invitación, estaba pastoreado por una mujer, Julie Hutchins. El grupo estaba formado por personas que habían sido sancionadas disciplinariamente siendo expulsadas de la Segunda Iglesia Bautista por causa de la herejía de la “segunda bendición” de la perfección sin pecado. En el camino a Los Ángeles, Seymour visitó el movimiento de la Columna de Fuego de Alma White en Denver, Colorado. Este grupo enseñaba la santificación sin pecado y creía que la evidencia de la misma era danzar. Alma White no estuvo impresionada con Seymour. Ella le describió a él como sigue: “Yo he encontrado toda clase de farsantes religiosos y bribones, pero siento que él sobresale sobre todos ellos”.
Luego de su arribo a Los Ángeles, Seymour predicó solamente un sermón antes de ser dejado afuera de la iglesia que lo invitó. En su sermón el había declarado que las lenguas eran la evidencia del recibimiento del Espíritu Santo. ¡El dijo eso a pesar del hecho de que él mismo nunca había hablado en lenguas! Romanos 8:9 dice llanamente ”Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él” [RV 1960]. Este es un asunto verdaderamente muy extraño. Uno de los fundadores claves del movimiento Pentecostal, por su propio testimonio, estaba predicando las más profundas verdades de la Palabra de Dios antes de haber aún conocido a Cristo, a pesar de que la Biblia dice que el hombre natural no puede conocer las cosas de Dios (1 Corintios 1:14).
Seymour trasladó su reunión a una casa, y luego a una construcción abandonada, en la Calle Azusa, y extraños fenómenos comenzaron a ser evidenciados. Las reuniones duraron más de tres años, y un gran número de personas visitaron Azusa Street para buscar su propio Pentecostés, tomando subsecuentemente la teología y experiencia Pentecostal y llevándolas hacia sus casas.
Las reuniones comenzaban en la mañana y continuaban por al menos 12 horas. Allí no había orden de los servicios y usualmente no había un conductor. Las personas cantaban a la vez pero “con completamente diferentes sílabas, ritmos, y melodías” (Ted Olsen, “El Pentecostés Americano”, Historia Cristiana, publicación 58, 1998). Los servicios estuvieron caracterizados por mucha confusión: danzas, saltos hacia arriba y luego abajo, caídas, trances, ser matado en el espíritu, “lenguas”, sacudidas, histeria, extraños ruidos, y “risa santa”. Un visitante describió la reunión como “demostraciones salvajes e histéricas”. Los buscadores solían ser “agarrados por un extraño hechizo y comenzaba una jerigonza de sonidos”. Un reportero del Times notó que los participantes “obraban en un estado de loca excitación en su peculiar fervor”.
Había poco o ningún orden en los servicios de la Calle Asuza. Quien se sentía “movido por el espíritu” a hablar, así lo haría. Seymour raramente predicó. En lugar de eso, la mayor parte del tiempo él mantenía su cabeza cubierta con una caja de embalaje vacía detrás del púlpito. Él enseñaba a la gente a gritar a Dios y demandar santificación, el bautismo con el Espíritu Santo, y sanidad divina (Synan, p. 99). Las descripciones de primera mano que he leído del “avivamiento” de la Calle Azusa suenan muy similares al actual “Avivamiento de la Risa”.
Cuando Parham visitó las reuniones en Octubre de 1906, aún él fue shockeado por la confusión de los servicios. Él fue desalentado por los “horribles ataques y espasmos” de los “santos rodantes e hipnotizadores”. Él describió las “lenguas” de Azusa como “cotorreos, farfulleos y chisporroteos, no hablando lenguaje en absoluto” (Synan, p. 102). Las reuniones de la Calle Azusa fueron tan salvajes que Parham las condenó con el término “sensacionalistas Rodadas Santas”. Él testificó que las reuniones de la Calle Azusa fueron grandemente caracterizadas por manifestaciones de la carne, controles espiritistas, y la práctica de hipnotismo (Sarah Parham, La Vida de Charles F. Parham, Joplin, MO: Tri-state Printing, 1930, p. 163). De acuerdo con Parham, dos tercios de las personas que profesaban el Pentecostalismo en su tiempo “están hipnotizadas o guiadas por un espíritu (Parham, La Vida de Charles F. Parham, p. 164). En sus escritos sobre Azusa Street, Parham describió a hombres y mujeres cayendo unos sobre otros en una manera moralmente comprometedora. Yo he estado viendo estas mismas cosas en grabaciones de video de los servicios del Avivamiento de la Risa.
Cuando Parham arribó a la Calle Azusa en 1906, comenzó su sermón diciendo a la gente que “Dios está con náuseas” a causa de las cosas que estaban ocurriendo en Azusa (Charles Shumway, Un Estudio de los “Dones de Lenguas”, Tesis de A. B., Universidad de California, 1914, pp. 178, 179; citado por Goff, Fields White Unto Harvest, p. 131). Él nunca cambió su opinión. Hacia el final de su vida, Parham, frecuentemente llamado “el padre del Pentecostalismo”, denunció a la Calle Azusa como un caso de “poder espiritual prostituido”. Así que el “padre del Pentecostalismo” rechazó sin rodeos las reuniones de la Calle Azusa como farsantes, manipuladas, y demoníacas, ¡aunque prácticamente todas las denominaciones Pentecostales trazan su herencia directamente desde esas reuniones!
Un hombre que ayudó a popularizar la reunión de la Calle Azusa por sus reportes de gran llegada fue FRANK BARTLEMAN (1871-1935). En 1925 él publicó un libro: Cómo “Pentecostés” Llegó a Los Ángeles: Cómo Fue esto en el Principio, describiendo las reuniones de Azusa. Éste fue reimpreso en 1955 y otra vez en 1980. Bartleman era un predicador Bautista recibido cuando, en 1897, él aceptó las falsas doctrinas de la sanidad en la expiación y la completa santificación y su unió al movimiento de santidad. Desde entonces el vagó de grupo en grupo: El Ejercito de Salvación, luego el Instituto Bíblico Moody, luego los Metodistas Wesleyanos, luego la organización de la Columna de Fuego guiada por la mujer predicadora Alma White, luego de vuelta a los Bautistas, luego a las reuniones Pentecostales de la Calle Azusa guiadas por Seymour. Finalmente él fue bautizado por el movimiento “Jesús Solamente” que negaba la tradicional doctrina bíblica de la Trinidad. Él reclamó la misma suerte de experiencias que son comunes hoy entre los proponentes del Avivamiento de la Risa. Bartleman estuvo “muerto en el Espíritu” por media hora frente a una congregación donde él había estado predicando. En otra ocasión él dijo que sintió “shocks eléctricos” hasta el punto de caer inconsciente ( Frank Bartleman, Azusa Street, introducción por Vincent Synan, p. xiii). A pesar de su doctrina de que Dios ha prometido sanidad física, Bartleman estuvo frecuentemente enfermo, a veces abatido hasta el punto del suicidio, y su hija mayor, Esther, murió en su niñez a pesar de su fe en la sanidad. Bartleman también promovió el mismo espíritu de ecumenismo que es popular en el actual Avivamiento de la Risa. El capítulo final de su libro sobre la Calle Azusa fue titulado “Un Ruego por la Unidad”.
“Cada nueva división o partido en la iglesia da al mundo una contradicción respecto a la unidad del cuerpo de Cristo, y la veracidad del Evangelio. Multitudes están inclinándose y quemando incienso ante una doctrina más bien que a Cristo. ... El Espíritu está trabajando por la unidad de los creyentes hoy, por el “cuerpo único”, para que la oración de Jesús pueda ser respondida: ‘que todos ellos puedan ser uno, para que el mundo pueda creer’” (Bartleman, Azusa Street, pp. 172, 173).
Note como Bartleman minimizó la pureza doctrinal y exaltó una unidad de la experiencia. Éste es uno de los temas característicos del Avivamiento de la Risa. Uno no puede inclinarse ante el verdadero Cristo sin mantener la verdadera doctrina sobre Cristo. La Biblia advierte que existen falsos cristos, falsos evangelios, y falsos espíritus. El único modo de protección en el medio de la generalizada apostasía espiritual y error es adherirse a la sana doctrina y señalar y eludir la falsa doctrina (Romanos 16:17). La Biblia no profetizó que todos los Cristianos profesantes estarían unidos en un avivamiento en las últimas horas de esta era. Ella profetiza más bien casi una universal apostasía (Mateo 24:4,5,11,25).
WILLIAM BRANHAM
Muchos otros bien conocidos sanadores Pentecostales han sido tomados en engaños y herejías. WILLIAM BRANHAM es considerado el más grande de los sanadores pentecostales, pero nosotros tenemos el testimonio visual de Alfred Pohl de que las cruzadas de Branham estuvieron marcadas por la exageración y el engaño. Branham también promovió múltiples herejías. Él negó la Trinidad (diciendo que ésta era del diablo), enseñó que Caín fue el producto de una unión sexual entre Eva y la serpiente, creyó que la marca de la bestia era el denominacionalismo, negó la eternidad del infierno, se proclamó a sí mismo como el ángel de Apocalipsis 3:14 y 10:7, y promovió la doctrina de los Hijos Manifiestos de Dios de la inmortalización de los apóstoles de los tiempos del fin. Él profetizó falsamente que el Rapto y el fin del mundo tomaría lugar por 1977. Branham pretendió que un ángel le enseñó como detectar enfermedades por vibraciones en su mano izquierda. “Cuando el espíritu de aflicción entra en contacto con el don produce tal conmoción física que ésta llega a ser visible sobre la mano del Hermano Branham, y tan realmente que ésta detendrá su reloj de muñeca instantáneamente. Esto le hace sentir al Hermano Branham igual que si se agarrase de un cable conectado con demasiada corriente eléctrica en él” (F. F. Bosworh, “Gifts of Healing Plus”, La Voz de la Sanidad, Marzo 1950, pp. 10-11). Branham manejó un don de adivinación exitosamente, leyendo detalles personales de las vidas de gente que encontraba. Él nombraría los nombres de personas que nunca antes había encontrado y describiría eventos pasados y pecados secretos de personas en sus reuniones. “Este don hizo mucho para fomentar la creciente leyenda de Branham” (Harrell, All Things Are Possible, p. 38). Branham supuestamente resucitó un pescado que había sido matado por un compañero (Ibid., p. 89). La confusión y el engaño envueltos en el ministerio de Branham fueron evidentes tempranamente en su carrera. Luego de pretender que su ángel había prometido que “Dios te envió a tomar un don de sanidad divina para la gente del mundo”, y luego de conducir cruzadas de sanidad en muchos lugares y atrayendo masivas multitudes, Branham repentinamente renunció en Mayo de 1948, ¡ANUNCIANDO QUE ÉL ESTABA ENFERMO (Harrell, p. 32)! Cinco meses después el continuó sus reuniones.
FRANKLIN HALL
FRANKLIN HALL, evangelista Pentecostal y autor del influyente libro Poder Atómico con Dios a través de la Oración y el Ayuno, enseñó que el ayuno y la oración eran los medios para la restauración de los milagros apostólicos para los tiempos del fin. Él promovió la doctrina de “la salvación sentida en el cuerpo”, declarando que ella era “700% más grande que el ordinario poder de sanidad” (Harrell, Todas las Cosas Son Posibles, p. 212). Él enseñó que el “fuego del Espíritu Santo” eliminaría el potencial para las enfermedades, el agotamiento, y aun el olor del cuerpo (Diccionario del Pentecostal, p. 346).
De acuerdo a Hall, tomaba aproximadamente 30 días para la la salvación sentida en el cuerpo o fuego del Espíritu Santo lograr tener todo asentado y en circulación sobre el cuerpo de una persona “de modo que pueda vivir completamente por sobre todo agotamiento y toda enfermedad”. Él reportó que una Hermana no había tenido agotamiento en 15 años. Él dijo que otra mujer, Thelma Moore, tuvo puestas las mismas medias por seis meses sin lavarlas y que ellas no se encostraron ni tuvieron olor desagradable. Él pretendió que una nube de gloria sobrevoló sus asambleas y enseñó a la multitud que cuando ellos elevaban sus manos izquierdas y decían “¡Hola Jesús!”, ellos olerían la fragancia de Jesús. Advirtió luego a la gente que deleitándose en la fragancia de Jesús, sus perros no los reconocerían, a causa de que ellos olerían diferente, y que sus casas serían a prueba de bichos, a causa de que la fragancia era “un Espíritu Santo exterminador”. En 1960 Hall publicó su Fórmula para Levantar los Muertos.
KATHRYN KUHLMAN
La muy influyente mujer evangelista sanadora KATHRYN KUHLMAN (1907-1976) es otro ejemplo de la herejía y la exageración que ha caracterizado el movimiento de la lluvia tardía. En los últimos años de la década de 1940 Kuhlman comenzó a enseñar que la sanidad física fue provista en la expiación de Jesucristo. En 1947 ella predicó que los milagros de Pentecostés deberían ser experimentados hoy, pretendiendo que los Cristianos hoy están habilitados para realizar los mismos milagros que Jesús realizó, y aún más grandes milagros. “Cada iglesia debería estar experimentando los milagros de Pentecostés. Cada iglesia debería estar viendo las sanidades del Libro de Hechos” (Kathryn Kuhlman, citado desde Jamie Buckingham, La Hija del Destino, p. 104). Ella publicó un folleto titulado “El Toque de Sanidad del Señor”. Sin embargo Kuhlman nunca fue capaz de hacer los milagros de Jesús. Fue alegado que hubieron sanidades orgánicas documentadas que tomaron lugar en algunas de las reuniones de Kuhlman, pero ellas fueron muy pocas, comparadas con sus pretensiones, ciertamente no fueron más que las sanidades que son experimentadas por los Cristianos que creen que los dones de señal han cesado y que oran por sanidad, confiando a Dios el hacer su perfecta voluntad. En su libro Sanidad: Un Doctor en Busca de un Milagro, el Dr. William Nolen dedica un capítulo entero a sus experiencias investigando cruzadas de sanidad de Kuhlman. Aunque simpatiza con Kuhlman como persona, Nolen no pudo documentar médicamente ni siquiera un caso de sanidad física, aunque un gran número de ellas habían sido proclamadas. Al tiempo de su investigación, el Dr. Nolen era jefe de cirugía en el Hospital Meeker County en Litchfield, Minnesota. Un reportero que cubrió una cruzada de sanidad de Kuhlman en el Carnegie Music Hall de Pittsburgh en 1948 testificó: “Por cada uno que ha proclamado una cura, una veintena más se ha desvanecido lejos en las tinieblas, tan miserables y desconsolados como cuando vinieron” (Wayne Warner, La Mujer Detrás de los Milagros: Kathryn kuhlman, p. 145). Kurt Koch fue un renombrado investigador evangélico en ocultismo. En su libro ABC del Ocultismo él describe su investigación en el ministerio de sanidad de Kathryn Kuhlman. Él cuidadosamente siguió una lista de 28 casos de sanidades alegadas en el área de Minneapolis, Minnesota. Esos casos fueron sometidos a su consideración por la organización de Kuhlman como los mejores ejemplos de sanidades que habían ocurrido bajo su ministración. El siguiente es el sumario de sus hallazgos: “Diez no han sido sanados, siete han experimentado un mejoramiento en su condición, once tuvieron enfermedades en las cuales la mente puede jugar una parte importante. En la totalidad de su extenso reporte, no hay un caso claro de sanidad de una enfermedad orgánica” (Kurt Koch, ABC del Ocultismo, Grand Rapids: Kregel Publishers, 1981).
Kuhlman enseñó que la gente podría ser sanada y entonces perder su sanidad si ellos fallaban en subir a la plataforma y testificar.
En sus últimos años, Kuhlman fue muy ecuménica, primero atrayendo grupos denominacionalmente diversos, luego urgiéndolos a no dejar sus iglesias sino más bien a retornar para ser una fuerza sanadora. Kuhlman también predicó decididamente un mensaje positivo, rechazando exponer el error doctrinal o el advertir contra el beber bebidas alcohólicas y otras maldades sociales. Ella creyó que predicando un evangelio positivo lograría más. Su biógrafo dice que Kuhlman está acreditada con el ayudar a tender puentes entre Protestantes y Católicos (Warner, p. 163). Kuhlman fue poderosamente influenciada por Maria Woodworth-Etter y ocasionalmente predicó en su lugar en Indianapolis. La antiescritural y peligrosa práctica de “el matar del espíritu” fue manifestada frecuentemente en los servicios de ambas mujeres. Aún su comprensivo biógrafo Pentecostal, el fallecido Jamie Buckingham, no pudo ocultar el desordenado amor de Kuhlman por las ropas caras y las joyas y su estilo de vida de primera clase. Su ministerio evangelístico recogió de dos a tres millones de dólares anualmente. Mientras pastoreaba el Tabernáculo de Avivamiento de Denver de 2000 asientos a mediados de los años 1930, Kuhlman llegó a estar envuelta románticamente con el evangelista casado Burroughs Waltrip, quien subsecuentemente dejó a su esposa y dos hijos y se casó con ella. Kuhlman y Waltrip estuvieron románticamente envueltos por dos o tres años antes de su casamiento. En el verano de 1935, dos años antes del divorcio de Waltrip en Junio de 1937, él y Kuhlman fueron pillados abrazandose y besándose en la oficina de la iglesia previamente a un servicio. Los dos se casaron en Octubre de 1938. Unos pocos años después de su ilícito casamiento, Kuhlman dejó a Waltrip, pretendiendo que Dios le había dado a ella a elegir entre su amor por un hombre y su amor por Dios y su llamamiento. La primera esposa de Waltrip fue dejada sola para criar a sus dos hijos y para pagar las deudas de su marido. Él nunca regresó a visitarla y aún falló en enviar los pagos para sostener los niños que le fueron señalados por la corte. Luego de su divorcio de Kuhlman. Waltrip se perdió de vista. Su hermano encontró más tarde que él hubo muerto en una prisión de California, condenado por tomar dinero de una mujer.


viernes, 7 de octubre de 2016

Rusia crea refugios para 12 millones de personas ante posible guerra nuclear con EE.UU.


Rusia construye enormes búnkeres nucleares en Moscú, capaces de escudar a 12 millones de personas, mientras Putin se prepara para unaguerra nuclear con EE.UU.
Los gigantescos refugios, cuya construcción fue revelada el viernes por funcionarios rusos, son una respuesta a la recién escalada de tensiones entre Moscú y Washington a raíz del conflicto en Siria, ha reportado este martes el diario británico Express.
En concreto, ambos países han intercambiado acusaciones sobre el fracaso de un alto el fuego que rigió durante una semana en Siria. Para Washington, Moscú no tomó las medidas adecuadas para cesar la ofensiva del Ejército sirio contra los terroristas en Alepo (norte), mientras, Rusia denuncia que los estadounidenses no han sido capaces de separar a los terroristas de la oposición.

La cooperación sobre Siria fue el último y mejor tiro de la administración de (Barack) Obama para prevenir la espiral descendente en las relaciones bilaterales con Rusia”, opinó un antiguo experto de la Casa Blanca, Andrew Wiess S.
Pero, el canal de televisión rusa Zvezda ha advertido a sus ciudadanos de que “los esquizofrénicos de América están afilando las armas nucleares a Moscú”, agregó el rotativo británico.
El rotativo comenta que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, habría ordenado el pasado mes la construcción de una instalación de 400 millas cuadradas en una región apartada en los Montes Urales, considerados frontera natural entre Europa y Asia, desde donde podría dirigir el conflicto nuclear.
Putin firmó el lunes un decreto por el que suspendió el tratado con EE.UU. sobre la reconversión de 24 toneladas de plutonio militar en combustible nuclear de uso pacífico, al considerar que Washington amenaza la estabilidad estratégica entre las dos potencias y no tiene intención de cumplir con el acuerdo.
Una guerra entre EE.UU. y Rusia podría provocar la peor catástrofe, pues Rusia mantiene en sus arsenales más armas nucleares que EE.UU., con 8400 cabezas nucleares, frente a las 7500 de EE.UU., según Express.